
Datos de interés, contacto y localización
Bonilla Essencial
Bonilla Essencial
Así nació todo, esta es mi historia.. La historia de Bonilla Essencial.
Años 50, tiempos de postguerra… parece que fue ayer, pero ya han pasado más de 6 décadas, cuando las necesidades de esa época, en una casa con 4 niños, sumado al carácter inquieto de Leoncia, mi abuela, hizo que se pusiera a comercializar productos de alimentación por los pueblos y cortijos del entorno de Montillana.
Mercante, Vanguardista e innovadora, dio un salto en su modelo de negocio: Mi abuela quiso aportar valor a la Mujer y liberarla de ciertas tareas, por lo que se lanzó a vender los primeros electrodomésticos y máquinas de coser por el entorno de los Montes orientales. Poco después, lo tuvo claro y vio la luz la primera tienda, “de productos de alimentación Bonilla”.
Posteriormente, mi madre adaptó todo lo aprendido a los nuevos marcos legales, y hace 18 años decidió abrir su propio establecimiento: productos Artesanales Bonilla. Un pequeño local de ultramarinos en Montillana, caracterizado por un toque moderno y de autoservicio, que por aquel entonces no existía.
Hoy en día, yo (Montse Bonilla) y tercera generación, con Bonilla Essencial apuesto por una imagen renovada basada en la personalidad de la familia, dando un giro a todo, para trabajar desde lo castizo a lo innovador, de lo tradicional a los nuevos tiempos, acercando al cliente lo exquisito de la comarca y de la provincia, en un nuevo entorno comercial.
Mi filosofía: “No existe modernidad, sin una buena tradición” (anónimo)
¿Quieres saber más?..
Conóceme:
En realidad, me llamo Montse Serrano Bonilla, diariamente combino las tareas de madre con las de mi negocio, ya que, como os imagináis, tengo una tienda de alimentación.
mmmm.. SÍ, una tienda de alimentación!!!!
Si has conseguido leer hasta aquí, te estarás preguntando: ¿una tienda de alimentación,?, ¿un súper de pueblo?, ¿pero… ? ¿y eso que tiene de especial? … .. Pues te lo cuento:
<< Combino tradición e innovación, con productos culinarios artesanales de alta calidad, ofreciendo a mi cliente exquisitez para todos los sentidos. Todo ello lo acompaño con un trato jovial, profesional y de cercanía, que le invitaran a debitarse con los diferentes sabores de mi tierra, y es que tengo un reto: quiero hacerle sentir, lo que yo sentía cuando era una niña. ¿Te lo vas a querer perder?>> .
EMPRESA.
¿Quienes Somos?
Bonilla Essencial, es una empresa familiar de alimentación, dedicada a la venta de productos de elaboración tradicional en un entorno renovado, típicos de las provincias de Granada y Jaén.
En Bonilla Essencial, contamos con una larga trayectoria de hijos a nietos y distendida experiencia en el sector agroalimentario. La actual tienda, sita en Montillana, tiene más de 18 años, y desde ella trabajamos día a día para ofrecer un trato personalizado, directo, de confianza, ofreciendo siempre los mejores productos de nuestra tierra.
Además como elemento diferenciador, ponemos a su disposición un equipo de gente joven expertos en negocios y con la formación adecuada, capaz de adaptarse a los repentinos cambios de las nuevas tecnologías, sin perder nuestro encanto: la venta tradicional.
Bonilla Essencial, apuesta por productos tradicionales elaborados con la más estricta política de calidad y respeto al Medio Ambiente. Productos “de toda la vida” con sabores únicos, que te transportan a una experiencia culinaria difícil de olvidar, ¿te atreves a probar?
Misión, Visión y valores
Misión
Fascinar al cliente con una experiencia única basada en la exquisitez de los 5 sentidos.
Visión
Recuperar, en pleno siglo XXI, los valores de la venta cercana y tradicional, siendo un referente en alimentación artesanal de alta calidad.
Nuestros Valores :
Excelencia en el sabor, en el producto y en la venta.
Confianza, en lo que comes.
Transparencia, en el origen de los productos.
Calidad.
Humildad, en el trato a las personas: Clientes y productores.
Experiencia, en lo que hacemos.
Respeto al medio ambientes, reduciendo la Huella de Carbono y dando valor a la economía circular.



